Tarde de Padel en el Colegio

Este Domingo ha habido torneo de Interclubs de chicas y chicos. No se que le pasa a mi género que en cuanto se juntan más de cuatro , aquello de la adolescencia de quién la tenia más grande o meaba más lejos, vuelve como si tal cosa, penoso , una panda de impresentables una banda de adolescentes de más de 25 años.
Vamos a disculpar a los menores , bravísimo Mario y Sergio, y a los energúmenos venidos del deporte más marrullero que existe, más lamentable y menos bello que hay precisamente por eso, confiando que un deporte de raíces nobles los des-animalice y les proporcione un barniz de educación, que por desgracia no han aprendido con el pantalón corto tantos años.
Para contra restar. La envidia sana que me despiertan siempre las convocatorias de las chicas tanto del primer equipo como del segundo, nada que ver con los marsupiales , descendientes de los homínidos.
Ellas siempre animando , una piña, con aquellas bromas de colegialas, esos pitidos, siempre respetuosos , con la merienda mimada , de guacamole , de empanada , de bocaditos de amor por muy cursi que suene , apetitosos pinchos de una entrañable competición
Del otro lado, unos jugadores, separados como en tierras Judeo- Palestinas, jugadores leprosos, diría yo, infectados de una extraña y mal interpretada competitividad, un equipo en Boston el otro en California.
Uno se acerca a ver un partido y tiene la sensación de que se ha metido en zona de guerra , que es un mercenario , un reportero en Sierra Leona o El Chad , o lo que es peor que ha pasado información a la resistencia Alemana.
Tengo que hacer autocrítica , ya que habiendome apuntado a este torneo , he sido poco considerado, con todo el trabajo de mi Equipo , y de mi Capitán por extensión, que es el alma de todo esto, y que sin Eusebio , es posible, que hoy el padel en La Coruña , no tuviera ni una sola competición de clubs, estaríamos todavia a estas horas, discutiendo sobre lo mencionado , quien la tiene más grande y orina más lejos.
Le he dicho a mi Capitán que desertaba y no quería jugar más, llevado por lo penoso de los acontecimientos de esta convocatoria, de lo que me desdigo y me pongo como en su día dije a su disposición, siempre que me necesite, y le pido humildemente perdón, por ser aveces tan borde y radical.
Eusebio el paciente, deberían de llamarle, lo he visto muchas veces capeando con unos con otros, escuchando a estúpidos , bobos de remate, pidiendo ,exigiendo etc, llamando a este al otro por teléfono ,antes de que todo esto empezase a funcionar, ahora mismo ,adelantando un dinero que no tiene por que poner el , en fin gracias, Eusebio, muchas gracias en el nombre del Padel Coruñés y de Canabal.